El último baluarte de la resistencia indígena tras la Guerra de Canaria
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Altos de Amurga y Las Fortalezas, en amarillo Paso de Los Solapones. Google Earth |
PABLO GUEDES GONZÁLEZ
29 de abril de 1483, 10 de la mañana, en el llano donde hoy se sitúa El Sitio de Abajo, en Tirajana. En esta fecha y lugar se produce la rendición de los últimos canarios alzados contra la conquista castellana de Gran Canaria, los del bando de Telde, los únicos que todavía oponían resistencia a la invasión de la isla, que había comenzado cinco años antes, bajo intervención de los Reyes Católicos, el 24 de junio de 1478 (anteriormente la conquista había sido llevada por parte del Señorío de las Islas o por incursiones de rapiña).
Los canarios rebeldes, acosados en los últimos meses de la Guerra de Canaria, se fueron refugiando en distintas fortalezas de la isla: Tirajana, Acairo, Titana, Fataga o Atagad, Bentaiga, Ajódar y Ansite; lugares sobre los cuales hemos estado realizando una investigación durante los últimos años, fundamentado en un análisis de las crónicas y textos que nos han llegado sobre la conquista y por un estudio profundo del territorio y de la toponimia. Los frutos de esta investigación se verán reflejados en un libro, que pretendemos que edite el Ayuntamiento de San Bartolomé de Tirajana, en cuyo término municipal se comprenden la mayoría de estos lugares, con apartado especial para Ansite, el lugar mítico donde se desarrollaron estos últimos hechos de la Conquista, y donde en sus cercanías también se sitúa la cueva que creemos que hemos localizado y que damos a conocer en este artículo: la Cueva de Los Alzados.
Estos alzados buscaron en Ansite, no solo un refugio físico, en la zona más agreste y abrupta de la isla, sino también un refugio espiritual, donde según las crónicas estaban dispuestos a llegar hasta el sacrificio definitivo: el suicidio ritual, situándose Ansite, según creemos, en el santuario más importante según su cosmogonía el de Umiaga/Amago, en Amurga.
Interpretamos a partir de nuestra investigación, que al campamento castellano, situado en El Sitio, bajaron los canarios rendidos, por el Paso del Camello, desde el Peñón de Ansite (Morro de Los Solapones) y de los Altos de Amurga. Creemos que entre ellos estaban, la princesa Masequera, la guayarmina, poseedora del vínculo hereditario del dominio de la isla y su tio Guariragua ‘El Tuerto’, Faicán de Telde y virtual capitán al mando de los guerreros canarios (del Bando de Telde) en la mayoría de las batallas con castellanos y portugueses desde los tiempos de la Torre de Gando, hermano de su madre fallecida, Atendira, en su tiempo la guayarmina, mujer del también fallecido Egonaiga “El Bueno”, guanarteme de Gáldar. Y junto a ellos, todos los canarios rebeldes a la dominación castellana, 160 guerreros según Marín de Cubas, junto a ancianos, mujeres y niños, que según Abreu Galindo, podían llegar a la cantidad de entre 600 y 1000 sublevados.
Antes de la bajada, Tenesor Semidán (Fernando Guanarteme, para los castellanos, primo y tio de Masequera, según Marín de Cubas), había subido para negociar la rendición con Bentejuí (hijo del fallecido Bentagoche, guanarteme de Telde), a su vez, guanarteme al ser marido de Masequera (la princesa guayarmina) y con Guariragua, el Faicán, el verdadero poder al mando de la sublevación (Bentejui, era un muchacho), que acepta la rendición. Todo ello desencadena unos acontecimientos, que creemos que podrían ser un ritual preestablecido, entre ellos la inmolación de Bentejui y otros personajes, arrojándose por el precipicio del Risco del Drago, a la vista del Teide, al grito de ‘Atis Tirma’, pues creemos que el Teide era su Tirma.
Pocos meses antes, creemos que en diciembre de 1482 o principios de 1483, se habría producido un hecho idéntico, en el episodio llamado de Fataga, al rendirse en bloque el bando de Gáldar en el mismo sitio, al mando de Tasarte, guanarteme en esos momentos (según Marín) y del Faicán de Gáldar, Guanache. Ello, ocasionó la bajada de los sublevados de Gáldar para rendirse, la inmolación de Tasarte y otros personajes, de la misma manera que Bentejuí, y la huida del bando de Telde junto con la guayarmina Masequera, Bentejuí y Guariragua, el otro faicán. Creemos que huyen, por el Paso del Drago (desde Morro de los Solapones a Risco del Drago ) y luego por los Altos de Amurga, bajando por el curso bajo del Bco. de Fataga para dirigirse a Ajódar, donde se producirá la batalla de triste recuerdo para los castellanos, en los primeros meses de 1483.
Según se desprende de las crónicas y documentos, la familia guanartémica tenia fuertes lazos de consanguinidad, con una herencia matrilinial, es decir el vínculo del poder se heredaba por linea materna (lo cual no quiere decir que estas mujeres gobernaran, aunque sí creemos que tuvieran un cierto poder, sobre todo religioso). Se supone que todos los guanartemes y faicanes estaban emparentados de alguna manera. Así, se cree que los guanartemes de Telde y Gáldar, Bentagache y Egonayga, fallecidos en ese tiempo de la rendición, eran hermanos o más probablemente primos hermanos y era Egonayga el guanarteme principal, al estar casado con Atendira, la guayarmina (la reina o poseedora del vínculo). La hija de estos, Masequera, hereda el vínculo al estar estos fallecidos y debido a su corta edad, creemos que son nombrados distintos guanartemes en funciones, al ser estos consortes con hermanas de Atendira. Así, tenemos a Aymediacoan (hermano de Bentagache y cuñado de Egonayga, creemos que casado con una hermana de Atendira), como guanarteme de Telde o de toda la isla (según Rumeu de Armas) que viaja a la Península en 1481, donde firma el Pacto de Calatayud, desde donde ya no regresa. Le sustituye Tenesor Semidán, después llamado Fernando Guanarteme, al mismo tiempo primo y tío de Masequera (según Marín), es decir sobrino de Egonayga, hijo de su hermano (por lo que es su primo) y a su vez casado con Abenchara, que debía ser hermana de Atendira (por tanto, también su tío político). Tenesor es capturado junto con Abenchara y trasladado a la Península, por lo que asume el mando Tasarte, también tío de Masequera, por lo que creemos que casado con una hermana de Atendira, y que se inmola en el episodio de Fataga, pensamos que en el mismo lugar que Bentejuí, meses después.
De la misma forma, los faicanes, los lideres religiosos y espirituales, con mucho poder y como vemos, también con el mando militar, creemos que eran los hermanos de la o las guayarminas. Así, tenemos a Guariragua el Tuerto, Faicán de Telde, del que sabemos que es hermano de Atendira y también es tío de Fernando Guanarteme (y creemos que su cuñado), pensamos que es a su vez, hermano de Guanache, Faicán de Gáldar, del que sabemos que, según Marín, también es tío de Fernando Guanarteme, por lo que la madre de este debía ser hermana de las mujeres de los dos faicanes. Lo que sí esta claro es que todos mantenían fuertes lazos de parentesco.
Después de la rendición, se acuerda que tras la recogida de la cosecha y de las fiestas solsticiales del 21 de junio, se entregaría a la princesa (o reina) Masequera, la guayarmina poseedora del vínculo y del poder de los guanartemes, a los castellanos en el Real de las Palmas. Y este hecho se sucede con gran solemnidad y protocolo, describiendo Marín de Cubas el mismo, con todo lujo de detalles, siendo una de sus descripciones más prolijas, que exponemos aquí por el gran valor histórico que conlleva y que valida alguna de nuestras consideraciones anteriores:
… Despues del mes de junio invio Pedro de Vera recado a don Fernando Guadartheme que hisiese venir a su sobrina, con los demas nobles sus parientes a el Real a entregarse como estaba pactado y luego dieron orden de traerla desde Tirajana por Telde sin que viniese con ella ningun xristiano español; traianla en ombros de quatro capitanes nobles de cabello largo y rubio, en unas andas de palo a modo de padiguelas [similar a trono de procesión], sentada, vestida de gamuza a modo de vadanas o pieles adovadas de color acanelado.
Venian delante de las andas quatro capitanes con capotillos de vadana llamados tamarcos, braguillas de junco, majos en los pies, y guapiletes en la caveza, y lo demas desnudos. A el lado de las andas algo asia atras dos tios suios faizages, y despues se seguia un grande acompañamiento de hombres todos que servian de traer las andas a remuda [relevo]. Salio Pedro de Vera con mucha gente a el recibimiento y ellos hisieron su entrega, por medio de la lengua o ynterprete diciendo, que alli venia la señora de toda la tierra heredera unica, y legitima hija de su señor Guanartemy Guanachy Semidan legitimo dueño y señor por verdadera linea, y succession de dominio, y señorio de la tierra [en realidad era su madre la verdadera heredera, aquí creemos que se traslada la costumbre de España], y que ella hazia entrega voluntaria, y todos sus tíos, y parientes que alli venian, governadores de la tierra en nombre, y devajo de la palabra de su señor mui poderoso, y catholico rey don Fernando; entregaba su persona, y personas a el capitan mayor de los xristianos, que alli presente se halla, que es Pedro de Vera, del rey de Castilla y Leon. Pedro de Vera, y demas cavalleros la recivieron a pie, y fue abrasando a todos con mucho cariño, traian todos los canarios el cavello suelto por las espaldas, y la señora Arminda [guayarmina – guayarminda: reina], que los españoles llamaron Almendrabella traia vestido un ropon de gamusa con medias mangas hasta la sangradera, y largo hasta los pies, y sapatos de lo mismo pespuntados, y vestida una tunicela devajo de la ropa con cuerpo de jubon a modo de justillo de mas delgada badana, era el cavello largo y ruvio, aderesado con arte, y en el puestas algunas cosas de tocado, que le havian dado a uso de España; y el faldellin pintado a colores: tendria casi veinte años era grueza, y mas de mediano cuerpo robusta el color algo moreno ojos grandes, y vivos, y el rostro algo alegre, y celebrada de hermosura la voca algo larga la nariz pequeña algo anchas las ventanas el cuello redondo, y crecida de pechos.
Despues que se huvieron adelantado del lado de las andas los dos faizages, y hisieron la entrega de su señora ...
Pero la rendición no fue total, como relatan los distintos testigos en la Información de Hidalguía de la hija de Tenesor Semidán o Fernando Guanarteme, llamada también Información Guanartémica (enlace aquí. Manuscrito 3, pp. 283, 293), documento en el que se relacionan los méritos de Fernando Guanarteme, realizado en 1526 a petición de su hija Margarita Fernández Guanarteme, donde tenemos una serie de testigos a los que se les hace una serie de preguntas, entre la que destacamos la pregunta n.º 11:
… si saben que despues de ganada la dicha Isla el dicho D. Fernando trabajó en conquistar y traer a el servicio de sus Altezas é á su sujecion ciertos caballeros Canarios é gente que se habian alzado é rebelado á lo mas áspero é agro de la tierra hasta tanto que todo fue allanado é quedó la dicha Isla enteramente en el poderio y servicio de sus Altezas.
A dicha cuestión, responden afirmativamente todos los testigos y uno de ellos, Fernando de Alvarez, conquistador y Tesorero Canónigo en la Iglesia Catedral de Canaria, cuenta:
… De la oncena pregunta dijo que lo que desta pregunta sabe es que despues de ganada la Isla cera [cerca] de un año, andubieron rebeldes alzados en cuadrillas por los campos é partes fuertes ciertos caballeros Canarios y el dicho Guanarteme trabajó en los conquistar é allanar toda la tierra é asi lo hizo con mucho trabajo el cual andaba muy acompañado asi de los Canarios que el habia traido al servicio de sus Altezas como de otra mucha gente de los conquistadores porque todos le querian bien é acompañaban viendo su mucha lealtad.
Y todo lo expuesto, viene a relación, porque en nuestra búsqueda de documentación para nuestra investigación sobre la Conquista y concretamente sobre el capítulo de Ansite, localizamos un artículo de Faneque Hernández y Juan R. García, que nos aportaba información sobre una ‘Cueva de los Alzados’, que era una referencia en los lindes de una finca, lindante a su vez, con las tierras de ‘El Gallego’ o ‘Los Gallegos’, topónimo originado por una familia con este origen, que se estableció en el s. XVI, en las tierras de ‘Ansitio’, con toda probabilidad, relacionadas con el Ansite de la conquista.
El gallego que originó el topónimo, fue Hernán Vázquez, perteneciente a una familia de carpinteros que se establecen en esta comarca, en la que explotaban a tributo tierras arboladas de pinar de Amurga, las tierras de Ansitio (1565), donde sacaban la madera del desaparecido pinar del macizo, para fabricar toneles.
El Sitio, como ya hemos expresado en diversos artículos, es una evolución de Ansite (finales s. XV)→ Ansitio (1565) → El Sitio (1687) → Los Sitios (actualidad), el lugar donde se desarrollaron los últimos acontecimientos de la Conquista de Gran Canaria, indicándonos este hecho a su vez, que esta ‘Cueva de Los Alzados’ debía muy probablemente, tener relación con la Conquista, pudiendo ser el refugio de los últimos canarios libres, antes de la dominación castellana de la isla, como se expresaba en la Información Guanartémica: «… ciertos caballeros Canarios é gente que se habian alzado é rebelado á lo mas áspero é agro de la tierra...».
En el artículo de Hernández y García (enlace aquí), estos investigadores hacen un agradecimiento al Cronista Oficial de Santa Brígida, Pedro Socorro, quién ha localizado y les ha facilitado la documentación, donde se hace referencia a dicha cueva (AHPLP Seg. 9. Leg. 2 - Tirajana, Cuaderno 2º de Hipotecas Año de 1774). En dicha documentación, tenemos una escritura de 1701 (218 años después de la conquista), donde se expresan los lindes de unas tierras en Tirajana, y entre ellas:
… sobre una suerte de tierras a vista del Gallego, término de Tirajana lindando por una parte el barranco real, por otra el roque que decían de las Garzas a la cueva de los alzados y por arriba el lomo de los cuervos ...
Hernández y García, creen que esta Cueva de Los Alzados, es la cueva que atraviesa, de lado a lado, La Fortaleza de Santa Lucia, donde según ellos, se continuaron refugiando estos alzados, tras la conquista, pues según su interpretación, El Gallego, se situaba en Los Sitios. La Fortaleza (de Santa Lucia), nombrada ya de esta manera, en documento de 1555, es para estos investigadores, el lugar donde se situaba la Fortaleza de Ansite, como creía a su vez Sánchez Araña desde los años 60 del pasado siglo, siendo el llano de Los Sitios Bajos, donde para ellos se estableció el campamento castellano (el Real de la Paz).
Nosotros estamos en desacuerdo en este punto con estos autores, pues como ya hemos expresado en diversos artículos y como detallaremos con numerosas explicaciones y argumentación en nuestro libro sobre la investigación, creemos, al igual que otros investigadores, que la Fortaleza de Ansite era el Morro de los Solapones, llamado modernamente la Fortaleza de Amurga, y como deducimos de la investigación del presente artículo, Ansitio o Ansite en principio daba nombre exclusivamente al área de la cumbre de Amurga, donde estos gallegos se dedicaban a la explotación del Pinar, y donde también tenemos los topónimos Andenes y Laderas de El Sitio, junto a la Fortaleza, lo que posteriormente dio nombre a los asentamientos de Los Sitios, ya junto al cauce del barranco.
Esto, lo deducimos porque en la mención a Ansitio (Legajo 852, 19 de junio de 1565 Escribano García Ortiz): «… los bienes y herederos de Hernan Vasques tonelero difunto questa puesto e situado sobre las tierras de Ansitio de Tirajana…», no tenemos delimitación de lindes por lo que suponemos que estas tierras debían ser un gran área de pinar donde estos gallegos realizaban la explotación de la madera.
Sumado a ello, tenemos en la actualidad el topónimo El Gallego, a 3400 m (en linea recta) del Risco del Drago, la cumbre del macizo, en la vertical del Sitio de Abajo, y hasta siete emplazamientos con este nombre en todo este área, como vemos en los mapas: un barranco, un caidero, un lomo, un morro, una umbria, una asomada y el propio lugar, por lo que aquí debe estar el sitio nombrado como El Gallego, al que se refiere la escritura de la Cueva de Los Alzados, así como otras escrituras que veremos (Cueva Grande y el Bco. de Los Negros).
Y nos preguntamos, ¿porqué en este lugar precisamente, se estableció el topónimo El Gallego y no barranco arriba, donde suponen Faneque y García, y donde Ansitio evolucionó a Los Sitios? Creemos que la explicación más probable, es la de que por este área se sitúa el camino para subir o bajar de la cumbre de Amurga (Ansite) con las yuntas de bueyes con las que se trasportaba la madera, pues barranco arriba tenemos riscos verticales cortados a cuchillo, donde resulta imposible subir con bestias para realizar dicha función (y difícilmente andando: tenemos la senda del Paso del Camello, que baja del Risco del Drago, que solo puede hacerse trepando). Y las tierras de Ansitio, probablemente abarcaban toda este área de los Altos de Amurga, donde existía un denso pinar que fue explotado hasta su desaparición total y por tanto la escritura de las tierras no señalaba a donde hoy tenemos a Los Sitios.
Actual
Finca de La Ereta con la cueva y camino de acceso a los Altos de
Amurga y probables lindes de las tierras de la escritura. Grafcan
Y tomando como referencia este topónimo de El Gallego, y las otras indicaciones en la escritura, localizamos en las cercanías, a un km en linea recta, una cueva destacada (en realidad un grupo de cuevas), que recibe actualmente el nombre de Cueva de Lereta o La Ereta y pensamos que esta, con muchas probabilidades, debía ser la Cueva de Los Alzados. Como vemos en el mapa, podemos delimitar unas tierras a partir de esta cueva, con un Morro de La Cuervera que debe ser evolución del Lomo de Los Cuervos, siendo los otros límites: el Lomo, «que decían» de Las Garzas, que podría ser el actual Morro del Gallego, continuando hasta el propio cauce del barranco.
Probables
lindes de las tierras de la escritura. Grafcan
La cueva se encuentra a unos 2 km en linea recta con El Sitio de Abajo, localizado barranco arriba y a 2´5 km en linea recta con Llanillo de los Asados (¿Alzados?), situado barranco abajo, lo que nos indicaría muy probablemente, que por este área de Amurga (entre otros sitios), en «lo mas áspero é agro de la tierra», se refugiaron estos alzados, buscando a su vez, al igual que había ocurrido con Ansite, no solo refugio físico, sino también refugio espiritual dentro de su santuario más importante. La cueva se encuentra actualmente, en el lugar de La Ereta, que da nombre a la actual finca de La Ereta, propiedad de la familia González, que comprende esta antigua propiedad y que llega hasta el Risco del Drago, siendo la finca de la controversia que pretendía comprar el Cabildo para plantación de pinar.
En enero de 2024, organizamos una expedición de exploración a Amurga en vehículos todoterreno, donde visitamos esta cueva. La llamamos ‘expedición’, por la logística empleada en la misma, así como por el tiempo y el recorrido que tuvimos que realizar, como si fuéramos a un territorio inexplorado o a una isla desierta. Y en realidad es así, porque Amurga, podría ser una isla dentro de Gran Canaria, por su aislamiento, lejanía y como indica la descripción del s. XVI por lo «áspero y agrio de la tierra». Documentamos dicha expedición en diferentes post en nuestro facebook, con un artículo de introducción (enlace aquí) y hasta nueve videos cortos o reels (enlace aquí), con la constatación y explicación de diferentes aspectos de nuestra investigación sobre el capítulo de Ansite: una fuente de agua descrita en las crónicas, los diferentes pasos o senderos de acceso a este lugar, el Morro de los Solapones para nosotros el probable Roque de Ansite, los restos arqueológicos que todavía podemos ver, etc.
Creemos que es fundamental un conocimiento profundo del territorio y de la toponimia, para afrontar la investigación, y es por eso que hemos contado con la ayuda de distintos pastores de los que queremos destacar a Santiago Ortega, conocido como “Sosa”, perfecto conocedor de Amurga, donde pastoreaba desde los 10 años y descendiente de una larga generación de pastores. De la misma forma Maximiano Trapero, perfectamente conocido, lingüista, premio Canarias 2017 de Patrimonio Histórico y uno de los mayores expertos en toponimia de Canarias, que realizará el prólogo de nuestro libro sobre la Conquista. Trapero comparte nuestras hipótesis lingüísticas sobre Amurga y el santuario de Amago/Umiaga, y apoya nuestra investigación.
El
objetivo de la expedición,
era llevar a
Sosa y a Trapero a
donde pensamos que se situaba Ansite, para
conocer in situ este territorio tan aislado y poco conocido y
verificar nuestras hipótesis y para ello también contamos con la
familia González, en las
personas de Jose Victoriano, Mario y Daniel González, a
los que reiteramos nuestro agradecimiento, que
nos franquearon el acceso a sus tierras y nos acompañaron en el
recorrido, donde también pudimos visitar la cueva que estamos dando
a conocer, que se sitúa en el corazón de su finca. Casualmente,
en aquel momento nos detuvimos a visitar esta cueva, porque Sosa
quería verla después de
muchos años, puesto que en
su juventud vivió en ella durante largo
tiempo, siendo su morada
en las labores de pastoreo de
Amurga.
Y es así, porque la cueva se sitúa en un punto estratégico del barranco, junto al actual y único camino de acceso en vehículo a Amurga y donde probablemente se situaba la senda por donde se bajaba la madera desde lo alto del macizo, pudiendo esta cueva a su vez, ser también el lugar de residencia de estos gallegos que se establecieron aquí después de la Conquista. Probablemente debía pasar también por aquí, la senda de paso al macizo, en el tiempo de los canarios, por donde se subía, viniendo desde la costa o desde Agüimes, para llegar a Ansite o para seguir a Fataga o a Pilancones.
En 1605 tenemos otra referencia con El Gallego, muy importante, porque creemos que nos sitúa este topónimo en el mismo lugar donde se ubica actualmente y no en el Sitio de Abajo, donde suponen Faneque Hernández y Juan R. García, que se situaba ese paraje. Ello corrobora Ansitio en la cumbre de Amurga, señalando a su vez, donde creemos, a la Cueva de los Alzados. Estos investigadores creen que la ‘Cueva Grande’, un lugar referenciado también con El Gallego, y el sitio donde habitaron los negros libertos del Barranco de Tirajana, es la cueva o tunel de 30 m, que atraviesa la Fortaleza de Santa Lucía, lo que a su vez, junto con otros razonamientos, les indica que El Gallego, estaba en Los Sitios. Recordamos que esta cueva de La Fortaleza era también para ellos la Cueva de Los Alzados.
De todo ello trataremos en nuestro próximo artículo con el título: “‘Cueva Grande’, frente a El Gallego, lugar del poblado de ’los negros de Tirajana’ hasta el s. XIX” (enlace aquí).
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(13 de septiembre de 2024). ¿Por qué Amagro no podía ser el nombre del Santuario de Tirajana? https://historiacastilloromeral.blogspot.com
(3 de abril de 2025). Localizado manuscrito del s. XVIII, con la lista supuestamente más fiel, de los 35 topónimos indígenas del tiempo de la Conquista. En https://historiacastilloromeral.blogspot.com
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